Esta cinta del director J.J Abrahms viene a revivir de alguna forma nuestra infancia. De cierta manera,es como recordar lo bueno de nuestro pasado .
En tiempos de superhéroes duros y con metas claras, adaptaciones a cómics que rayan en lo inocuo, aparece esta película, donde los protagonistas son héroes de carne y hueso, gente normal que va encontrándose y desencontrándose con diferente tópicos que existe a nuestro alrededor (despertar sexual, relaciones de amistad, relaciones familiares), y lo mejor aún, no falla en el corazón y la nostalgia,obviamente apelando a aspectos técnicos y cinematográficos de primer nivel.
SUPER 8 es un homenaje hecho y derecho, y con toda propiedad, a Steven Spielberg y su cine fantástico. La cinta cuenta la historia de Joe, quien recientemente ha perdido a su madre en trágicas circunstancias. Su padre, policía del pueblo, poco entiende de crianza y al parecer entre los dos no existe mucha conexión. Joe y su grupo de amigos están filmando una película de zombies y presencian un tremendo accidente de tren. Todo indica que el accidente fue intencional y liberó una extraña criatura que rondará la ciudad.
Al ser éste un homenaje asumido, veremos muchos elementos que nos parecerán reconocibles he incluso predecibles, pero la gracia de esta cinta a mi juicio no es sorprendernos con algo original, e incluso poco importa el giro que Abrahms nos oculta hasta el final con la aparición del monstruo. La película se siente cercana en diferentes aspectos, y emociona por las resonancias que puede tener en una persona. En mí, por ejemplo, resaltó mi infancia, mis amigos, las tonterías, mi barrio. Porque “Super 8” busca precisamente eso, emocionar evocando nuestro propio pasado.
A no equivocarse, puesto que si bien la cinta puede parecer a primera vista como un film de ciencia ficción de salto y destrucción, esta es una mera excusa para resaltar cosas que emocionan, una mezcla de elementos de películas como “ET” Y “Encuentros cercanos”.
Yo me quedo con la emocionante historia de padre e hijo y con los amigos más importantes y que nos marcan toda la vida; los de la infancia.
¡IMPERDIBLE ¡
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